“retenciones móviles a la exportación”. Este impuesto fijaba una rentabilidad anual fija del treinta por ciento para el empresario. Los beneficios que superaran este tope serían para el Gobierno. Si subía el precio de los productos, se incrementaban las retenciones; si disminuía el precio, bajaban. El enfrentamiento entre el campo y el Gobierno se desató el 18 de febrero, cuando cuatro entidades rurales acordaron dejar de comercializar productos como protesta ante el impuesto, por considerar que limita en exceso la capacidad de facturación de las empresas. Las manifestaciones se radicalizaron pronto. En abril, el Gobierno tuvo que cortar autopistas porque el humo ocasionado por los trabajadores del campo, que había comenzado a quemar pastizales, impedía la visibilidad. Sólo tres días después, la humareda ya afectaba a la zona centro y sur de Argentina y se hacía visible en el este de Uruguay. La oposición y la mayoría de medios de comunicación apoyaron a los manifestantes del campo, que hicieron una demostración de fuerza el 25 de mayo en Rosario, la ciudad más poblada de la provincia de Santa Fe, donde 250.000 manifestantes se reunieron para rechazar el gravamen. Después de que el Congreso apoyara el proyecto de las retenciones, éste llegó al Senado, donde la votación terminó igualada: 36 votos a favor y 36 en contra. El presidente de la Cámara y vicepresidente del país, Julio César Cobos, se vio obligado a desempatar y emitió el voto definitivo, un ‘no’ que acabó anulando los impuestos y suponiendo la mayor derrota política de la presidencia de Cristina. Las críticas a Fernández no cesan ahí. La prensa, que se ha sentido atacada públicamente por la presidenta, no ha acabado de perdonarle este trato. Cristina, que se resistió a dar una rueda de prensa pública hasta el 2 de agosto, ocho meses después de llegar a la presidencia, ha sido colocada en el punto de mira de los medios de comunicación, que no ha desaprovechado la oportunidad de recordarle su presunta implicación en el ‘Caso Valijagate’. El caso comenzó el 4 de agosto de 2007, cuando agentes de la aduana argentina interceptaron 790.550 dólares no declarados en la maleta del empresario venezolano Guido Antonini Wilson. En diciembre de 2007, el FBI arrestó a tres ciudadanos venezolanos y uno uruguayo en Miami, acusados de presionar a Antonini para que no revelara el origen y destino del dinero decomisado en Argentina. Según el FBI, el dinero fue enviado por Chávez para apoyar la ... |